LAMENTO LO OCURRIDO, DE RICHARD FORD

El autor, en la presentación del libro, Barcelona, 28.9.19

Lamento lo ocurrido (Sorry for Your Trouble), de Richard Ford
Anagrama, Barcelona, 2019, 270 páginas
Traducción de Damià Alou
En España: 19,90 euros. En Argentina aún no se lo ha distribuido. Se lo consigue en librerías on line a distinto precio.

Había que admitir que experimentaba cierta sensación de ser alguien que tan solo pasaba por allí

“El mundo, a menudo, no nos presta atención”. El que habla es Richard Ford, un autor que va yendo cada vez más a lo esencial, sin estridencia alguna. Ha vuelto ahora con este conjunto de relatos que, por deferencia hacia el editor Jorge Herralde, entregó a Anagrama para su traducción meses antes de que se lo conozca en inglés. Un verdadero regalo para la señera editorial catalana que le ha publicado toda su obra. Y qué regalo.

Los diez relatos que integran el libro confluyen en torno a personas del común que viven momentos de excepción. Es gente a la que hay que seguir en sus derroteros vivenciales, como ocurre con esos antiguos amantes que luego de años vuelven a encontrarse por casualidad en la calurosa Nueva Orleans. Ellos, Sandy y Barbara, veinticinco años atrás decidieron hacer un viaje a Islandia casi sin conocerse. Pareja “de paso”, nunca más volvieron a verse hasta que casi por accidente se da el rencuentro que deriva en una larga caminata por la vieja ciudad, en un pesado atardecer primaveral.

El lector desprevenido podría decir que en este relato de apertura (“Nada que declarar”) no ocurre ninguna cosa relevante, aunque, en simultáneo, pase de todo. Es, fundamentalmente, lo que no se dice, o se dice a medias, o en forma tangencial, aquello que prevalece. El silencio, y lo que esconde dicho mutismo. El final de la historia, aquí reproducido, resulta significativo. En él, el autor despliega su gran habilidad (y calidad) narrativa.

Ese “pase de todo” hay que remitirlo al maestro Chéjov, quien enseñó cómo narrar los matices, aquello que se esconde en un segundo o en un tercer plano. Cuanto se sugiere, o se deduce, pero que ningún personaje dice de manera explícita.

De aquel viejo maestro ruso ha devenido este ponderado maestro norteamericano. En cada una de esas historias ocurre lo inefable, lo que no se expresa en forma explícita, lo que subyace. Ya se trate de la pareja reencontrada o de un viaje hacia lo perdido (“En coche”), el recuerdo de un muerto (“Feliz”), o un hecho de adulterio (“No es mucho pedir”), del pasado familiar (“Desplazado”, una ficción con algunos apuntes autobiográficos) o del racismo (“Rumbo a Kenosha”, que habla además de la relación entre padre e hija). Ya se trate del encuentro casual que, en un caso, deriva en el gratuito enfrentamiento político (“Jimmy Green”) y en otro, en una inesperada convivencia nocturna (“Perder los papeles", que también habla de una reciente viudez) o de una inesperada interpelación de un chico a un adulto (“De incógnito”), todo converge hacia ese “misterio” que nunca terminará de develarse.

Cuánta sutileza despliega el maestro Ford. Con cuánta elegancia, además.  No porque eluda las palabras “gruesas” ni determinados detalles que hacen a la intimidad de las personas, sino porque sabe calar hondo en todo momento, decir lo justo, callar lo que no corresponde.

Lecciones de buena narrativa, en medio de tanto libro olvidable, Lamento lo ocurrido es un gran paseo por la mejor literatura. Es para agradecer, mister Richard Ford.

Nueva Orleans en primavera
Habla el padre de Sandy:
“A estas alturas no espero autocomplacencia. Eso te lo puedo prometer. Nada de lo que estar orgulloso. Debes evitar eso. No es el peor defecto humano, pero es el más natural.
“-Si -contestó Sandy-. Lo haré.
“Y ya no volvieron a hablar más del asunto. Su padre había sido un hombre de pronunciamientos, que había aprendido duras lecciones de la vida (…) Sandy comprendió que su padre estaba pensando en un asunto privado: dejar arreglada a la mujer a la que había abandonado, para la cual no deseaba ningún reconocimiento ni ningún comentario especial.
“Recordaría su conversación en los momentos más inesperados -como ese-, cuando quizás esperaría otros pensamientos más positivos. Pronto sería la hora de la cena. Se encontraría con su mujer, con la que iba a compartirla. Los asuntos previstos, variados, y meticulosamente ensayados del día. Su última hora -su hora con Barbara- no sería ensayada. No produciría ningún resultado, lo que en sí mismo le proporcionaba un pequeño reposo. Tal como su padre había sabido y dicho, tenemos poco de lo que enorgullecernos. Cosa que no hablaba a favor ni en contra de nadie, sino que simplemente le permitiría acometer esa velada, y las incontables veladas que quedaban”. (Páginas 34 y 35).

Datos para una biografía:
Richard Ford (1944, Jackson, Mississippi, Estados Unidos) ha publicado siete novelas: Un trozo de mi corazón (1976), La última oportunidad (1981), Incendios (1990), Canadá (2012) y la trilogía protagonizada por el personaje Frank Bascombe: El periodista deportivo (1986), El Día de la Independencia (1995; premios Pulitzer y PEN/Faulkner) y Acción de Gracias (2006), cinco libros de relatos: Rock Springs (1987), De mujeres con hombres (1997), Pecados sin cuento (2002), Francamente, Frank (2014) y el aquí comentado, el libro de memorias Mi madre (1998), incorporado luego a Entre ellos (2018) y Flores en las grietas, selección de ensayos (2012). Está casado desde 1968 con Kristina Hensey. Es autor del guion de “El despertar de un ángel” (“Bright Angel”) película de 1990 dirigida por Michael Fields. Ha sido responsable de varias antologías, especialmente las editadas por la revista Granta. Colabora con diversos periódicos de su país. Es profesor de Escritura en la Escuela de Artes de la Universidad de Columbia y fue galardonado varias veces con los principales premios literarios de Estados Unidos. En su reciente visita a España confirmó que está trabajando en una nueva novela con Bascombe como protagonista. Anteriormente había comentado que imaginaba a su personaje viajando en una casa rodante o caravana, con su hijo Paul, el Día de San Valentín.



Video: Diálogo de Richard Ford con Mariana Enriquez en el Museo MALBA de Buenos Aires, domingo 29 de abril de 2018. Subido a YouTube por el MALBA el 17.5.18. Duración; una hora, ocho minutos. En traducción simultánea al castellano 


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